Rael, el profeta de la clonación
Secta "ufóloga" promueve experimentos para duplicar humanos
Lunes 2 de abril de 2001 - Agencias
Líder de los raelianos afirma que fuimos creados por los Elohim y dice que clonará a un ser humano en un plazo máximo de 24 meses.
A los 27 años, Claude Vorilhon, era el editor de una de las más importantes revistas francesas del deporte automovilístico y piloto de carreras. En ese entonces su único objetivo era participar en la Fórmula 1. Pero el 13 de diciembre de 1973, la vida de Vorilhon tuvo un brusco giro cuando, cerca de un volcán situado en Clermont Ferrand (centro de Francia), vio aparecer silenciosamente un ovni de siete metros de diámetro, hecho de un metal muy brillante.
Un ser resplandeciente bajó de dicha nave y le confió un mensaje que revela el verdadero origen de la humanidad. "Todo ser vivo sobre la Tierra dice Rael, incluyendo el hombre, fue creado científicamente en laboratorio, gracias a un dominio perfecto de la ingeniería genética y del ADN, alcanzado por estos seres venidos de otro planeta: los Elohim".
Fueron los Elohim los que confiaron a Rael la misión de difundir esta revelación, y le pidieron que construyera una embajada extraterrestre en nuestro planeta, a la cual llegarían próximamente en compañía de otros grandes mensajeros, como Jesús, Moisés, Buda y Mahoma, quienes se mantendrían con vida en su planeta gracias a la clonación, el secreto de la vida eterna.
Desde entonces el periodista galo cambió su nombre por el de Rael, fundando dos años más tarde el movimiento de los Raelianos, secta "ufóloga" religiosa que profesa que la vida en la Tierra fue establecida por seres de otro planeta que vinieron en platos voladores hace 25.000 años, y que los alienígenas son seres clonados.
A principios de los años 90, Rael se fue de Francia, porque se sentía perseguido. Desde entonces, vive habitualmente en Canadá, en una lujosa residencia construida en honor de los extraterrestres. Con su traje blanco futurista con hombreras elevadas y zapatillas deportivas blancas, Rael cuenta que "la clonación es la puerta que nos llevará a lograr la vida eterna gracias a la ciencia. Podremos vivir eternamente. Jamás moriremos", asegura.
Rael sostiene que en la actualidad la clonación se encuentra en su "etapa inicial". Agrega que "la segunda etapa será cuando seamos capaces de obtener el crecimiento acelerado que permitirá clonar directamente un adulto, que será como una cinta de audio virgen. No tendrá memoria". Por último, "la tercera etapa consistirá en transferir la personalidad, la memoria, en ese cuerpo nuevo, como lo hicieron los Elohim, los extraterrestres con los que me reuní", afirma.
El movimiento raeliano es una religión atea, como el budismo, y en la actualidad cuenta con 55.000 miembros distribuidos en 84 países.
El texto de su doctrina "La ciencia es nuestra religión"
El líder de la secta de los "raelianos", grupo que propugna la clonación de los seres humanos, afirmó ante un comité del Congreso de EE.UU. que prohibir la clonación supondría "frenar la ciencia". Junto a un numeroso grupo de científicos contrarios a la clonación y otro de partidarios de la misma, Rael compareció recientemente ante el subcomité de Supervisión e Investigación de la Clonación Humana, que se ha creado en el Congreso de EE.UU.
Rael no es un científico, aunque algunos de los miembros de la secta son diplomados en biología y reproducción asistida y defienden la clonación como un método científico para avanzar en la perfección del ser humano.
"Nosotros, los raelianos, creemos que la ciencia es nuestra religión", declaró Rael ante el comité, quien aseguró que había estado en una nave extraterrestre, como invitado, donde comprobó que todos los alienígenas eran seres clonados. Un documentado informe publicado en el suplemento dominical del diario The New York Times, advertía contra la posibilidad de tomarse a broma o como "chiflados" a los "raelianos".
Según su líder, la secta ha recibido numerosas donaciones de personas que afirman estar dispuestas a clonar a un niño y no necesariamente para "mejorar la raza" o crear seres superiores. En este sentido, citó el caso de un abogado estadounidense y su esposa que desean clonar las células de su hijo muerto a causa de un error médico. El matrimonio, dijo, puso a disposición de la secta los más de 200 mil dólares que recibieron del hospital como indemnización por la muerte del pequeño.
El anuncio de dos científicos de que planean clonar a un ser humano en los próximos años y el creciente interés en EE.UU. sobre este tema, llevó al Congreso a crear un subcomité que analice si podría llegar a prohibirse en el país este tipo de experimentos.
El bebé de sus sueños
El fundador del Movimiento Raeliano sostiene que la vida en la Tierra fue creada de forma científica en laboratorios por seres extraterrestres, cuyo nombre (Elohim) se encuentra en la Biblia hebrea y fue erróneamente traducida por la palabra "Dios". Rael que también sostiene que la resurrección de Jesús fue una clonación hecha por los Elohim anunció que él y un grupo de inversores establecieron una compañía denominada Valiant Venture Ltd, la cual ofrece un servicio llamado Clonaid para ofrecer asistencia a aquellos futuros padres que estén dispuestos a tener un hijo clonado de uno de ellos.
La empresa, establecida en las Bahamas, tiene planeado construir un laboratorio en un país en donde la clonación humana no sea ilegal, y ofrecer sus servicios a parejas provenientes de todo el mundo. En una primera fase, va a subcontratar laboratorios existentes para que realicen la clonación. Clonaid (según se informa en la página web clonaid.com) cobrará el reducido importe de US $200.000 dólares por sus servicios de duplicación.
La directora científica de Clonaid, la doctora y científica francesa Brigitte Boisselier, no ve ningún problema ético con el procedimiento. "¿Quién se va a escandalizar hoy en día ante la idea de devolver a la vida a un niño de 10 meses que murió de manera accidental? La tecnología lo permite, los padres lo desean, y yo no veo ningún problema ético", opinó. La empresa también ofrece un servicio llamado Insuraclone, el cual, por una tarifa de $50.000 dólares, recogerá y almacenará en un lugar seguro células de un hijo en vida o de una persona amada, para poder así crear un clon en caso de que ésta muera debido a una enfermedad incurable o por accidente. En el caso de una enfermedad genética, las células serán preservadas hasta que la ciencia pueda repararlas.