La verdad jamás estará en los ignorantes, en los cobardes, en los cómplices, en los serviles y menos aún en los idiotas. |
El diario íntimo de Cristina. Por Diego Sehinkman. |
Continúan los ciberataques; esta vez el hacker se metió en la computadora de la mandataria y se llevó una sorpresa: la Presidenta vuelca sus pensamientos más profundos en un simple archivo de Word que hasta hoy era secreto; aquí va un fragmento que el pirata informático dio a conocer a la prensa.
Querido diario:
(Qué difícil me resulta todavía decirle “querido” a un diario. Desde 2008 y el campo, cuando me quemé con tinta, veo un diario y lloro). Hasta hace unos días me pasaba algo horrible: me vestía de negro como siempre, me paraba frente al espejo, subía los codos y giraba. ¡Pero el luto ya no me convertía en la mujer maravilla!. Yo decía: Buenos Aires, Santa Fe, Córdoba. ¿Qué pasa que hace 3 elecciones que el truco no funciona?
Porque a ver, tengo que ser franca: yo pensé que además de arropar mi viudez, el luto también me iba a servir de delantal. Y que sobre el negro, las manchas que me volcaron Schoklender, Hebe y Zaffaroni se iban a notar menos. Pero no. Últimamente el traje de súper congoja no me daba ningún poder.
Pero justo cuando me empezaba a desesperar pensando en que el domingo no llegaba al 40, el Universo conspiró a mi favor: crisis económica en EE. UU., crisis educativa en Chile y crisis social en Londres. Yo dije: “¡Ahora sí da gusto poner TN para disfrutar de que afuera, es “Todo Negativo”!
Quiero decir: no es por ser mala, pero con el derrumbe de la economía mundial, ¿quién va a votar a alguien de apellido Alfonsín? ¿O por Duhalde que armó el corralón y devaluó?
Con nuestro modelo -¡El Modelo!- la crisis de EE. UU. no nos va a afectar. ¿Por qué? Porque nosotros tuvimos la dignidad de decirle al mundo que no, cuando nos quiso prestar plata al 14 o al 15 por ciento. Argentina no está endeudada y los argentinos no están endeudados. Por eso, hoy el problema lo tiene Obama. A ellos les rebajaron la calificación de su deuda, que pasó de ser Triple A, a doble A. Eso a nosotros no nos afecta porque crediticiamente, como diría el Tano Pasman, “¡Estamos en la B!”.
Nuestros indicadores económicos, al lado de lo que le pasa al mundo, brillan. Por eso el que quedó pedaleando fue Reutemann, que antes de irse a Miami pidió que por la inflación, saquemos un billete de 500. Es imposible por dos cosas: 1) sería reconocer que existe y 2) para un billete de 500, no hay prócer que quiera poner la cara.
Además, ¿quién me puede dar consejos? ¿Redrado, que el último paper que publicó fue en la Revista Paparazzi? Mi plantel de colaboradores en materia económica no pavea. Si la gente viera qué conmovedora es la escena todas las mañanas: estamos en una reunión y yo pido que me reporten novedades. Entonces Guillermo Moreno da un paso al frente, se inclina en una reverencia y me dice: “Señora, homenajeando a Groucho Marx, le digo: estas son mis cifras. Si no le gustan, tengo otras”.
Pero ahora hablemos de política: ¡cuánto ensañamiento con Hebe y Zaffaroni! Lo tengo muy claro: quieren destruir el núcleo ético del kirchnerismo. Aunque alguno pueda decir: si ese color tiene el carozo, lo que será el durazno.
¿Quiénes nos quieren destruir? Los de la “corpo” y los de la “opo”. Sí. “Corpo” y “opo”. Porque en el kirchnerismo ya inventamos palabras con las que armamos un código compartido entre nosotros. Como hacen las religiones y las sectas.
Querido diario: se vienen las primarias y no sé por qué, me puse nostálgica y recordé mi colegio primario. ¿Qué me enseñaron ahí que me haya servido para siempre? A dividir.
Pero ahora quiero confesarte algo que me duele en serio: creo que en estas elecciones dependo demasiado de Scioli y de sus votos del conurbano. ¡Y qué agrandado está el motonauta! Para hacerse el independiente, el domingo pasado salió en un aviso a página entera rezando en una iglesia. Pobrecito, lo que es la esclavitud mental. Lo critican por arrodillarse 8 años ante Néstor y ante mí, ¡y sale arrodillado ante otro, que tiene las manos más atadas que él!
Es que Danielito no tiene “La fuerza de él”. “Él” tenía coraje de verdad. Si lo hubiera tenido enfrente a Jesús, en vez de arrodillarse, le hubiera dicho lo mismo que a Scioli. “¡Diga, señor Redentor, quién le ata las manos!”
Me emociono tanto al recordarlo… ¿Sabés, querido diario, que en Río Gallegos le estamos haciendo un mausoleo de 11 metros de altura? La obra conmueve. No tanto por el tamaño, sino porque es la primera en donde Lázaro Báez, con buen tino, no sobrefactura.
Por último, te lo confieso: me di cuenta de que no puedo vivir sin él. ¿Cuántos años juntos? Casi 25. No me refiero a Kirchner sino al poder, con el que estoy en pareja desde el 1987, cuando agarramos la intendencia de Río Gallegos. ¡Qué tierno me resultaba ver a los que decían que yo no me iba a presentar! ¿Cómo me iba a quedar sin mi compañero de tantos años?
Viuda de Néstor, sí. Separada del poder, no.
Nota: Diego Sehinkman es periodista, psicólogo y guionista. Todos los domingos escribe la columna “Terapia” en el Suplemento Enfoques y acaba de sacar el libro “¿Qué tienen los políticos en la cabeza? (Traumas, complejos y taras psicológicas de nuestros dirigentes)” por Ediciones B- Vergara.
Fuente: La Nación.