La verdad jamás estará en los ignorantes, en los cobardes, en los cómplices, en los serviles y menos aún en los idiotas. |
Un nuevo dato Illuminati.
Por Gustavo Fernández. |
Como todos saben muy bien, el tema de los Illuminati es de preferencial interés para nosotros. Una de las aristas que debemos admitir más nos intrigan es la hipotética —por ahora, sólo hipotética— relación que pudieron haber tenido —o pueden tener— los miembros de este Gobierno en las Sombras con extraterrestres.
Sabemos claramente que puestos a buscar evidencias demoraremos años en obtenerlas —si es que lo logramos, y ello siempre y cuando realmente las haya— pero nos interesa ir facilitando algunas suspicacias. Estamos realizando unas investigaciones personales obviamente sobre este tema, pero también estamos “desempolvando” una vieja cuestión: la de los hipotéticos visitantes del planeta “Ummo” y la intoxicación de los medios ovnilógicos, quizás más con fines políticos que otra cosa.
La cuestión es que en la búsqueda, específicamente de contactos “Ummitas” en Argentina —comentados por los principales investigadores mundiales, entre ellos el inolvidable Antonio Ribera y el venerable Ignacio Darnaude— localizamos, además de las sempiternas referencias a cartas de ese origen en poder del fallecido sacerdote jesuita Segundo Benito Reyna, las que habría recibido a fines de los ’60 la desaparecida revista argentina “2001”.
Precisamente, en el número 16 de dicha revista se entrevistaba a un contactado español, protagonista del célebre caso “Francisco Atienza” —sobre el que volveremos en su oportunidad— escondido detrás del seudónimo “F. Sinod”. Antonio Ribera en su oportunidad develó la verdadera identidad de este ya fallecido personaje: se trataría de Francisco Donis Ortiz (“Sinod” es, obviamente, un acróstico de “Donis”) hombre de negocios español.
El dato extra que aportamos es este: Francisco Donis Ortiz era el representante comercial para España de los multimillonarios estadounidenses David y Laurance Rockefeller. Y si tuvieron la paciencia de leer la nota anterior, esto no es un dato menor. (https://bolinfodecarlos.com.ar/080507_conexion_rockefeller.htm )
Puede tratarse simplemente de una afición personal. Pero sabido el concierto que tocan los Rockefeller en el tema Illuminati, sospechamos que tanto de cierto o mentira haya en el fenómeno OVNI no será precisamente David Rockefeller quien deberá seguir el paso del investigador de a pie para enterarse de alguna novedad.
Puesto de otra manera: su posición de poder —económico y político— le permitirá sin duda acceder a respuestas de preguntas intrigantes sin estar necesariamente apoyando monetariamente a diligentes investigadores que se acercan a zonas de aterrizajes para recoger muestras del suelo.
A menos que su participación tenga que ver con, o bien financiar investigaciones puntuales de las que poco sabemos y donde las publicadas son apenas una máscara —entonces tenemos una conspiración— o bien está para “intoxicar económicamente” la correcta investigación. De todas maneras, no creemos “casual” esta relación entre el banquero y poderoso financista y este contactado.