La verdad jamás estará en los ignorantes, en los cobardes, en los cómplices, en los serviles y menos aún en los idiotas.

El trastorno histriónico o narcisista de la personalidad.

1) Trastorno histriónico

Definición: El trastorno histriónico de la personalidad se caracteriza por una emotividad generalizada y excesiva y un comportamiento de búsqueda de atención por parte de los que están alrededor.

¿CÓMO SE MANIFIESTA?

• No se siente cómodo en las situaciones en las que no es el centro de atención (le gusta, por ejemplo, ser el “alma de la fiesta”).

• La interacción con los demás suele estar caracterizada por un comportamiento seductor o provocador (tienden a seducir a sus nuevos conocidos por ser aparentemente muy abiertos o muy seductores al principio de una amistad, aunque esta actitud va disminuyendo conforme tiene más confianza con la persona en cuestión).

• Muestra una expresión emocional superficial y rápidamente cambiante (Esto se da en todas sus relaciones sociales, laborales y profesionales).

• Utiliza permanentemente el aspecto físico para llamar la atención sobre sí mismo. Tiene una forma de hablar excesivamente subjetiva y carente de matices (Expresan opiniones contundentes con un natural talento dramático, pero los argumentos subyacentes suelen ser vagos y difusos y no se apoyan en hechos ni pormenores).

• Muestra autodramatización, teatralidad y exagerada expresión emocional.

• Es sugestionable, por ejemplo, fácilmente influenciable por los demás o por las circunstancias.

• Considera sus relaciones más íntimas de lo que son en realidad (Tratan a casi cualquier conocido como “mi querido amigo” y tutean a todo el mundo por este mismo motivo).

¿CÓMO SON ESTOS SUJETOS?

Las personas histriónicas pueden tener dificultades para alcanzar la intimidad emocional; además, a menudo se entristecen cuando no son el centro de atención.

Por otro lado, en todas sus acciones buscan la gratificación inmediata, y cuando comienzan a dedicarse a una actividad, su interés se desvanece rápidamente.

Los histriónicos suelen presentar trastornos de somatización y trastorno depresivo mayor.

Prevalencia

En cuanto a la prevalencia, se estima que aproximadamente el 2 - 3% de la población general padece el trastorno histriónico de la personalidad; en el ámbito clínico se ha observado una mayor prevalencia en mujeres, si bien en la población general se estima que las diferencias entre hombres y mujeres no son significativas.

2) Trastorno narcisista

Definición: El trastorno narcisista de la personalidad se caracteriza por un patrón general de grandiosidad, necesidad de admiración y falta de empatía (capacidad de “conectar” emocionalmente con los demás) que empieza al principio de la edad adulta y se da en diversos contextos.

¿CÓMO SE MANIFIESTA?

• Tiene un grandioso sentido de autoimportancia; por ejemplo, exagera los logros y capacidades, espera ser reconocido como superior sin unos logros proporcionados, etc. (Es habitual en los narcisistas sobrevalorar sus capacidades y exagerar sus conocimientos y cualidades, por lo cual suelen dar la sensación de ser personas jactanciosas o presuntuosas).

• Está preocupado por fantasías de éxito ilimitado, poder, brillantez, belleza o amor imaginados).

• Cree que es “especial” y único y que sólo puede ser comprendido por, o sólo puede relacionarse con otras personas (o instituciones) que son especiales o de alto nivel (atribuyen a aquellas personas con las que se relacionan las cualidades de ser “únicos”, “perfectos” o tener “talento”).

• Exige una admiración excesiva (Es un síntoma que denota un abaja autoestima y una gran preocupación por hacer bien el trabajo y por cómo son vistos por los demás).

• Es muy pretencioso; por ejemplo, tiene expectativas irrazonables de recibir un trato de favor especial o de que se cumplan automáticamente sus expectativas.

• Es explotador; por ejemplo, saca provecho de los demás para alcanzar sus propias metas (esperan que se les dé todo lo que deseen, sin importar lo que ello suponga para los demás, y pueden asumir que los demás están totalmente interesados en su bienestar).

• Carece de empatía: es reacio a reconocer o identificarse con los sentimientos y necesidades de los demás.

• Frecuentemente envidia a los demás o cree que los demás le envidian a él.

• Presenta comportamientos o actitudes arrogantes o soberbios.

¿CÓMO SON ESTOS SUJETOS?

Los sujetos narcisistas poseen una autoestima muy vulnerable, siendo por esto muy sensible al “ultraje” de la crítica o la frustración; en relación con esto, las críticas pueden llegar a obsesionarlos y hacer que se sientan hundidos y vacíos. Otro síntoma es el deterioro de sus relaciones sociales como consecuencia de su pretenciosidad y necesidad constante de admiración. Otro síntoma es la incapacidad para arriesgar nada por la posibilidad de frustración que ello conlleva.

Prevalencia

Se estima que se da entre el 2% y el 16% en poblaciones clínicas, y menos del 1% de la población general lo padece.

3) Sobre el mismo trastorno del narcisismo Wikipedia dice:

La personalidad narcisista se caracteriza por un patrón grandioso de vida; éste se expresa en fantasías o modos de conducta que incapacitan al individuo para ver al otro. Su visión de las cosas es el patrón al cual el mundo debe someterse. Para los narcisistas el mundo se guía y debe obedecer a sus propios puntos de vista, los cuales considera irrebatibles, infalibles, auto-generados. Las cosas más obvias y corrientes, si se le ocurren a él o ella, deben ser vistas con admiración y se emborracha en la expresión de las mismas.

Hay en el narcisista una inagotable sed de admiración y adulación. Esta necesidad lo incapacita para poder reflexionar tranquilamente y valorar serenamente la realidad. Vive más preocupado por su actuación, en cuanto al efecto teatral y reconocimiento externo de sus acciones, que en la eficacia real y utilidad de las mismas. En resumen, las personas narcisistas, aun cuando pueden poseer una aguda inteligencia, ésta se halla obnubilada por esa visión grandiosa de sí mismas y por su hambre de reconocimiento.

Llama la atención, entonces, como muchas personas, pudiendo ser exitosas, productivas y creativas, someten su vida a aduladoras mediocridades. Cuando los narcisistas ejercen posiciones de poder, se rodean de personas que, por su propia condición, son inferiores a él o ella, y de otras, que le harán la corte sólo en función de un interés mezquino. Ellas, drogadas por su discurso auto-dirigido, no son capaces de reflexionar y escuchar lo que el mundo externo les grita.

En la otra cara de la moneda, la personalidad narcisista es, en sí misma, una forma de supervivencia. Hemos visto en el mito cómo Narciso es el producto de una acción terrible. La personalidad narcisista nace de una violencia, de un terrible trauma, de una herida inferida al individuo en sus primeras etapas del desarrollo o antes, cuando la herida es la madre y ella trasmite al hijo su resentimiento, su dolor, su rabia y su temor. Se refugia, el traumatizado, en su propia imagen de grandiosidad, ello le permite elevar su maltrecha auto-estima y sentirse un poco mejor consigo mismo. Su hambre insaciable de reconocimiento se asila en la admiración y la adulación de quienes lo circundan.

El narcisista es una persona que puede ser muy exitosa, en cuanto al brillo externo se refiere. Él no se plantea dudas en cuanto a la realidad de sus ideas, sean éstas brillantes o no. Así vemos cómo personas con una inteligencia mediocre y una cultura pobre, escalan posiciones sorprendentes; para ellas, el recapacitar no existe. Aun las más insulsas ideas son expresadas con un espíritu mesiánico, se enamoran de las ideas de otros y las hacen propias sin la más mínima consideración moral ni ética.

4) Cómo influyen estos trastornos en la personalidad de los Presidentes o Primeros Ministros.

a) Por su excesiva autoestima, no tolera la crítica, y tiende a interpretarla como ofensiva. Se contradice con la virtud de la tolerancia o comprensión que debe distinguir a los funcionarios de las repúblicas democráticas, respecto de las opiniones de la oposición o de la prensa, ya que este sistema se sostiene en la pluralidad política y consecuentemente en la libertad de opinar.

b) Este trastorno lleva en la función pública a la persecución de la prensa independiente, a la falta de diálogo y al desprecio de la oposición. Por la misma razón no puede entender ni aceptar la independencia de los sectores.

c) Este carácter es incompatible con la división de los poderes y su correlativa autonomía, en forma total o determinando los limites compatibles que señala su propia tolerancia.

d) En las funciones ejecutivas este desorden lleva a la total concentración del poder en su persona, y considera una concesión el ejercicio de las atribuciones propias de las demás funciones del Estado. Por lo mismo estima natural la total subordinación a sí y considera natural la obsecuencia y la adulación.

e) Asimismo lleva a la exageración de las virtudes propias y al menosprecio de las ajenas, y de ahí que considere sus decisiones o logros como los mayores de la historia nacional.

f) En el orden personal causa a la persona que lo sufre, profundas depresiones, cuando cree percibir que no es reconocida y también momentos de exaltación cuando ocupa situaciones de gran exhibición, acentuando su actuación con muestras de gran teatralidad. Es extremadamente cuidadosa de su aspecto físico, y el cuidado general de su persona, y en sus relaciones con terceros pasa con rapidez de situaciones de estima y confianza a situaciones de crítica y menosprecio.

Fuente: El Informador Público.

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